¿Qué es el efecto “Hamaca”? Quizás lo sufro y no lo sé.

Existen muchas razones por las cuales podemos vernos en la necesidad de adquirir una silla de ruedas. Cuando decidimos asesorarnos en la compra de una silla buscamos a los profesionales. Ellos nos ayudaran a escoger la mejor silla para nuestras necesidades de uso diario, uso en interiores o exteriores, para transporte de terceros o uso personal, la condición por la cual la necesitamos y nosotros la escogemos en base a nuestro presupuesto y nuestros gustos, como color o marca.

Al momento de tomar la decisión los profesionales nos ofrecen un cojín para acompañar la silla. Muchas veces vemos la silla y vemos que tiene un asiento ya incluido. Estos pueden ser de nylon, de tela o de tela acolchada y pensamos no con esto basta y no hacemos caso a las recomendaciones de los asesores de salud.

Después de cierto tiempo de uso de la silla, por cuestiones de peso y de la resistencia del material poco a poco la rigidez del mismo se comienza a vencer y comenzamos a tener algunos problemas a la hora de sentarnos o sentar a nuestro familiar. Esto se conoce como efecto “Hamaca”. Esto es básicamente cuando el asiento de la silla presenta un hundimiento en la parte media o central. Tratamos de resolver esto colocando un cojín que tenemos en nuestro hogar, con toallas o con cualquier espuma que encontremos por ahí.

Este hundimiento en el medio tiene muchas consecuencias a largo plazo que da; aran la postura del usuario de la silla de ruedas. Los muslos comienzan a juntarse creando presión en los huesos la pelvis y ocasionando dolor. Además, las rodillas comienzan a juntarse y podemos tener problemas por presión en estos puntos. La columna se comienza a flexionar, el cuerpo se comienza a movilizar hacia adelante ocasionando presión en los otros huesos de la pelvis además de fricción en los glúteos, muslos y columna.

Estos problemas si no se resuelven nos pueden llevar a las temidas ulceras por presión además de deformidades en la columna y pelvis que en ocasiones no son reversibles. Estos problemas son causados por la tela que su tensión cedió y ya no se resuelve colocando un cojín, se debe cambiar.

Todo esto que hemos visto anteriormente se puede evitar fácilmente adquiriendo un cojín junto con la silla de ruedas en la primera compra. Esto lo puedes hacer fácilmente con la silla de Ruedas Coyote/Corsac de Loh Medical. Esta silla de ruedas plegable de aluminio ya viene con un cojín Jay Basic que es una espuma suave, con un contorneado leve para pacientes con poco riesgo de lesiones de piel. Con Coyote/Corsac el Cojín no es adicional, es parte de la silla. Si deseas otro tipo de cojín que sea adecuado para tus necesidades puedes consultar con nuestro equipo de profesionales para que te asesoren.

Un buen cojín es tan importante como una buena silla. Todo esto lo tienes con Coyote/Corsac.